El 2021 fue un año difícil para los ganaderos de vacas de leche en España. Se ha observado un incremento importante del coste medio pagado a los ganaderos, un 35,6%, pasando de 0,342 euros por litro a 0,464 €. Esto nos indica que la demanda del producto aumentó, a pesar de la disminución de la producción, que bajó 2,2%, con 7.323.653 toneladas recogidas durante el año.
✔️ Los precios de la leche se disparan en Castilla y León, Cataluña y Andalucía
Las comunidades autónomas donde más se ha incrementado el precio han sido Castilla y León, con un 39,5%, seguida de Cataluña (37,9%) y Andalucía (37,6%). Galicia, la región con mayor producción de leche de vaca, ha experimentado un aumento del 36,3% del precio, hasta los 0,454 euros por litro. Solamente Asturias tuvo un aumento del precio inferior al 30%, alcanzando el 29,2% desde 0,359 a 0,464 €/L.
Este ascenso del precio, a pesar de la disminución de la producción, nos demuestra la firme demanda y el valor que tiene la leche de vaca en España. Esto es una buena noticia para los ganaderos, quienes han visto cómo su trabajo y esfuerzo han sido reconocidos con un aumento de su recompensa. Esto también supone una mejora en los ingresos, lo que les permitirá invertir y mejorar la calidad y cantidad de la producción.
✔️ Galicia, la máxima productora, experimenta un aumento del 36,3% en el precio pagado a los ganaderos
La producción de España ha experimentado una reducción significativa de un 2,2% desde 2021. Las regiones más productivas han descendido, como Cantabria con una disminución del 6,5%, Asturias con una bajada de 5,8% y Andalucía con una merma del 3,9%. La comunidad autónoma de Cataluña también experimentó un descenso del 2,1%. Por su parte, Galicia registró una leve caída del 0,6%, mientras que Castilla y León veían una caída del 0,8%.
✔️ Incentivos y programas de apoyo para ayudar a los productores españoles a enfrentar los desafíos
Estas cifras dejan una perspectiva preocupante para el futuro de la producción española, especialmente en las regiones más afectadas. Para preservar la productividad, se requieren medidas inmediatas. Esto incluye la creación de incentivos y programas de respaldo para ayudar a los productores a superar los desafíos que enfrentan. También se necesitan políticas económicas que apoyen a los productores en el desarrollo de nuevos productos para satisfacer la demanda de los consumidores. Finalmente, la innovación en tecnologías de fabricación debe ser prioritaria para mejorar la eficiencia de los procesos de producción.
Enlace al Informe del Consumo Alimentario en España 2021 – https://bit.ly/3JJOer5