Bruselas, 6 de diciembre – La Unión Europea aprobó el 6 de diciembre nuevas normas que prohíben a las empresas vender en el mercado europeo productos vinculados a la deforestación mundial, como la soja, la carne de vacuno y el café.
Según la ley, las empresas que venden sus productos en la UE deben demostrar que sus cadenas de suministro no contribuyen a la deforestación, pues de lo contrario se exponen a fuertes multas.
Esta declaración fue realizada por el negociador jefe del Parlamento Europeo, Christophe Hansen: “Esperamos que esta importante ley refuerce la protección de los bosques del mundo e inspire a otros países a unirse a la COP15”.
En la conferencia COP15 de la ONU de esta semana, los países buscarán un acuerdo global para proteger la naturaleza abordando la deforestación, una de las principales fuentes de emisiones de gases de efecto invernadero que conducen al cambio climático.
Los negociadores de los Estados miembros de la UE y el Parlamento Europeo acordaron el proyecto el martes por la mañana.
Abarca la soja, la carne de vacuno, el aceite de palma, la madera, el cacao y el café, así como algunos productos elaborados a partir de ellos, tanto el cuero, el chocolate y los muebles. El caucho, el carbón vegetal y algunos productos del aceite de palma se incluyeron a petición de los países miembros.
Las empresas deben indicar cuándo y dónde se fabrican los productos, así como proporcionar información “verificada” de que no han sido cosechados, es decir, que no se han producido a partir de tierras deforestadas después de 2020.
También deben demostrar que se respetaron los derechos de los pueblos indígenas en la elaboración del producto.
El incumplimiento de los requisitos puede acarrear multas de hasta el 4% del volumen de negocios de la empresa en la UE.
Ahora los países de la UE y sus parlamentos deben aprobar formalmente la ley. La ley puede entrar en vigor en 20 días, pero algunas disposiciones seguirán vigentes durante 18 meses.
Los países de la UE deben garantizar el cumplimiento del 9% de los exportadores de países de alto riesgo, el 3% de los exportadores de países de riesgo normal y el 1% de los exportadores de países de bajo riesgo.
Países como Indonesia, Brasil, Colombia y Malasia han criticado el sistema de la UE, advirtiendo de que las normas son complejas y costosas.
El Comisario de Medio Ambiente, Vygirijus Sinkevičius, declaró a Reuters que había visitado los países afectados por la ley y se había reunido con los gobiernos, afirmando que la UE estaba trabajando con los países para ayudarles a mejorar su capacidad de aplicar la ley.