◼️ Una reducción sin precedentes del 10% en los precios de los productores de leche desata la agitación en el sector

En una medida sorprendente, los productores lácteos gallegos experimentaron en abril una llamativa reducción de precio de “entre 6 y 10 céntimos menos”, lo que provocó una preocupación generalizada y trastornos en el sector. Esta pronunciada caída de los ingresos ha provocado un gran estrés entre los ganaderos, que se enfrentan en la actualidad a la difícil tarea de aclimatarse a estas nuevas circunstancias.

◼️ El sindicato Unións Agrarias (UUAA), pide sanciones para proteger a los agricultores de las rescisiones injustas de contratos

En respuesta a estos drásticos recortes en los precios que se abonan a las explotaciones, los sindicatos han exigido la introducción de penalizaciones por no presentar ofertas dos meses antes de la rescisión de un contrato. El objetivo de esta acción es salvaguardar a los ganaderos de un desorden económico brusco y lograr un acuerdo más equitativo y previsible para todos los participantes implicados.

◼️ Los precios de la leche caen en picado, lo que agrava la tensión en el sector lácteo

La reducción ha repercutido notablemente en el precio de la leche que se abona a los ganaderos, cuyo coste por litro se ha desplomado de unos 0,58 € a un precio base de entre 0,47 y 0,48 euros. Este importante descenso, de entre 6 y 10 céntimos por litro, plantea importantes obstáculos al sector, que se enfrenta a las secuelas del primer trimestre de 2023, un periodo caracterizado por una precipitada escalada de los precios.

◼️ Doble rasero e incoherencias en la regulación de precios

El sector lácteo se enfrenta a incoherencias en la regulación de los precios, ya que algunas partes interesadas sostienen que el mercado de España es distinto del mercado europeo en general. Sin embargo, cuando los precios de la leche retroceden en favor de estos grupos de interés, el ejercicio abrupto del control de precios se percibe como engañoso e injusto.

◼️ Reducciones injustificadas en el difícil mercado español

En el arduo mercado español, donde la producción solamente satisface el 80% de las necesidades de la población, no hay fundamento racional para las reducciones de precios. El precio al por menor pagado por los consumidores ha alcanzado un máximo histórico, con la leche 40 céntimos más cara que antes de la crisis. Se cree que esta bajada de precios se ha aplicado para mantener la estabilidad artificial del mercado, imponiéndose contratos de únicamente 4 meses de duración, a pesar de la obligación legal de cubrir un año completo.

◼️ La amenaza inminente de la escasez de leche y la escalada de precios

La industria láctea se enfrenta ahora al riesgo potencial de que resurja la escasez de leche en octubre y noviembre. Esto conduciría inevitablemente a una escalada de precios y escasez, agravando aún más los retos a los que se enfrenta el sector.

◼️ Inacción administrativa y reticencia a aplicar la protección jurídica

A pesar de la existencia de instrumentos legales diseñados para proteger la industria láctea, ha habido una falta de acción proactiva por parte de la administración. Esta reticencia a imponer la protección legal ha impulsado a los productores individuales a presentar quejas, ya que muchos temen que al hacerlo se ponga en peligro su capacidad de recogida de leche, un bien perecedero. Si no son capaces de recoger leche, pueden verse obligados a poner fin a sus empresas, generando un mayor caos en el sector.

Sin duda, el sector lácteo está luchando actualmente con las repercusiones de la reducción de hasta el 10%, enfrentándose a retos que van desde la regulación errática de los precios hasta la amenaza de la escasez de leche. La inercia de la administración agrava estos problemas, por lo que es vital que tanto el gobierno como la industria colaboren con el fin de encontrar soluciones sostenibles para el futuro del sector lácteo gallego.

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